La FAPROMIN advierte: Volver a las malas prácticas del pasado traerá graves consecuencias para la minería argentina
- 8 de agosto, 2025
Durísimo comunicado de la Federación Argentina de Proveedores Mineros

La Federación Argentina de Proveedores Mineros, integrada por las Cámaras de referencia de las provincias productoras mineras del país, advirtió que, si las empresas mineras dejan de lado la contratación de proveedores locales y nacionales en pos de empresas extranjeras, esto traerá graves consecuencias para la minería del país.
El documento se generó en una reunión mantenida por los referentes de la institución en el contexto de la pasada edición del evento sobre cobre que se realizó en San Juan, organizada por Panorama Minero.
El posicionamiento de la institución se da en un contexto de polémicas en varias provincias productoras mineras, a partir de la intención, declarada públicamente, de las mineras operadoras de buscar proveedores fuera del país y facilitar su llegada a Argentina.
En el paper, los proveedores de la Federación, integrada por las cámaras de Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan y Santa Cruz, advierten sobre la importancia de mantener el modelo de desarrollo de cadenas de valor locales que permitió la aceptación de la industria luego de años de trabajo.
Aceptación social en riesgo
Como dice esta institución, el trabajo conjunto de empresas, gobiernos y proveedores permitió la aceptación social de la actividad en distritos y comunidades conflictivas.
Plantean que ahora, cuando el trabajo minero es aceptado, valorado y bienvenido, el recambio de ejecutivos por parte de las operadoras trae aparejado el lógico desconocimiento de los años bravos que tuvo que atravesar la industria y el trabajo que se hizo para revertir esta situación.
La FAPROMIN advierte que malas decisiones por parte de las mineras podrían traer aparejadas consecuencias negativas y tirar por la borda lo que se hizo.
El documento:
Volver a las malas prácticas del pasado traerá graves consecuencias para la minería argentina
Costó años de trabajo fortalecer la cadena de valor local en cada una de las provincias mineras, y hoy vemos como, por la actitud de algunas empresas operadoras, el modelo alcanzado está en riesgo.
Contribución
Los proveedores locales, pequeños, medianos y grandes contribuyeron significativamente a que la minería deje de ser mala palabra en las comunidades.
Con la generación de empleo local, el desarrollo del segundo y tercer anillo de proveedores de cada localidad, las empresas proveedoras son, en buena parte, las garantes de la licencia social y política y la aceptación y consenso social que permite a las empresas mineras instalarse, explorar y producir sin los sobresaltos ni conflictos de antaño.
Hoy, vemos como este modelo, y los acuerdos entre las operadoras, gobiernos, comunidades y cadena de valor son soslayados y dejados de lado.
Ejemplos
Los ejemplos a nivel país sobran:
Solo para citar algunos, en San Juan la posición de Vicuña para con los locales y el fomento de instalación paulatina de empresas extranjeras.
En Catamarca, empresas exploradoras comienzan a reemplazar proveedores y adjudicar licitaciones a empresas extranjeras, con relación directa.
Reemplazan proveedores argentinos por empresas de sus países, aduciendo que son “de confianza”.
En Salta se está dando exactamente el mismo caso e inclusive, algunas empresas como Mansfield repiten el mismo patrón, poniendo a las comunidades en alerta y generando rechazos y amenazas de la vuelta de conflictos sociales.
Jujuy y Santa Cruz no están exentos de esta situación.
Actitudes que perjudican y condicionan
Estas actitudes no solo perjudican las economías provinciales y, sobre todo, de las comunidades del interior profundo de cada provincia, sino que también condicionan el futuro de otros proyectos mineros y del impulso a la actividad en otras provincias conflictivas, como Mendoza o La Rioja.
En todos los casos que se observan en las provincias mineras, es notorio el avance contra las contrataciones locales y adjudicación de contratos a empresas foráneas, que ni siquiera se preocupan por cumplir con las reglamentaciones vigentes.
En todos los casos, fueron reemplazadas empresas locales, o con fuerte arraigo local de probada capacidad de trabajo y de experiencia para poder cumplir con las exigencias de las operadoras a la hora de cumplir con sus contratos.
En todos los casos, las empresas reemplazadas tienen capacidad para brindar idéntico o mejor servicio que las foráneas.
Mentira
Es una mentira decir que la cadena de valor “no está preparada”, como lo deslizan algunas compañías, por medio de sus portavoces.
Advertimos que, de continuar estos avances negativos, la actividad pueda volver a ser repudiada en las comunidades, como años atrás.
¿Será que los nuevos ejecutivos de las compañías no tuvieron que sufrir el descrédito, las agresiones y las acciones que complicaban sus trabajos?
Cuerpo y alma
Fueron muchas las empresas proveedoras de cada provincia las que pusieron cuerpo y alma en los tiempos difíciles, trabajando codo a codo con gobiernos y empresas mineras para revertir la mala imagen de la actividad, resultante de años de malas prácticas y poco impacto de la industria en las economías locales.
Fueron las empresas las que impulsaron y aplicaron la formación y el desarrollo de la cadena de valor local, gastando buena parte de sus presupuestos para tal fin.
Fueron las empresas las que incentivaron a los proveedores a asociarse y crear instituciones como la nuestra.
Nuevas gestiones, viejos errores
Ahora, nuevas gestiones y nuevos ejecutivos buscan repetir los errores del pasado.
Ahora, cuando todo “está fácil”, parecen haber perdido la memoria, o no leer los mapas de riesgo que les dejaron sus antecesores.
Queremos y exigimos memoria.
Queremos y exigimos que se mantenga el modelo exitoso y sostenible para todos.
Esperamos ser oídos.
Y sabemos que, cuando las papas quemen nuevamente, volverán a buscarnos por ayuda. Estamos a tiempo de evitar volver al pasado.
Con información de Noticias Mineras
Once Diario