Minerales de Latinoamérica atraen a UE para paliar predominio de China

Europa busca liberarse de la dependencia de China como principal abastecedor de minerales en su avance hacia la descarbonización,

Por lo que vuelca la mirada hacia América Latina por ser una región fecunda en materias primas, especialmente de litio.

Pero las incertidumbres regulatorias en Chile, Bolivia y México llevarían a que, para 2030, cerca del 63% de la oferta global de litio derive de rocas y no de salmueras, dijo el geólogo Michael Schmidt, de la Agencia Alemana de Recursos Minerales (DERA). 

"La capacidad de convertir la espodumena será clave para el abastecimiento futuro”, señaló Schmidt acerca del silicato de litio disponible en rocas que prevalece en países como Australia, Canadá, China y Finlandia. En cambio, en Latinoamérica, que concentra más del 70% de los recursos de litio del mundo, la extracción se obtiene principalmente de salmueras.

La escasez de litio y otros minerales seguirá persistiendo "si la industria y los gobiernos no toman las acciones e inversiones necesarias. Ante este panorama, solo el reciclaje sería la solución”, advierte Schmidt.

Según un artículo del medio alemán Deutsche Welle, la Unión Europea (UE) importa entre un 75% y el 100% de los metales que necesita su industria y su principal proveedor es China, tanto de materias primas como de minerales procesados.

La estrategia geopolítica europea tiene por objetivo evitar una situación similar a lo experimentado con Rusia, cuyo suministro de gas natural ha sido usado como un arma de dominio político. Mientras la Universidad de Lovaina pronostica que el continente europeo enfrentaría una escasez de litio, cobalto, níquel, cobre y tierras raras en los próximos 15 años, un reciente informe de la consultora Mckinsey adelantó el plazo del déficit de níquel y litio para 2025.

La situación preocupa a la UE, ya que la demanda de minerales para la fabricación de baterías para vehículos eléctricos representará el 90% de la producción mundial de litio hacia 2030 y podría elevarse a 560.000t, señaló el experto en un evento organizado el miércoles por la Cámara Chileno-Alemana de Comercio e Industria. La actividad forma parte de las iniciativas entre la UE y América Latina para avanzar en la integración de las cadenas de valor industriales.   

Los 27 Estados miembros de la UE se comprometieron al Pacto Verde para alcanzar la carbononeutralidad en 2050, incluida una reducción de sus emisiones en al menos 55% respecto de los niveles de 1990 y la instalación de un 40% de energías renovables para 2030.

Baterías eléctricas, turbinas eólicas y redes eléctricas ampliadas son solo algunos de los mercados que requieren altas cantidades de minerales. Desde 2020 el Banco Mundial estima que la producción minera debiera dispararse en 500% hacia 2050 para apoyar los objetivos climáticos.

Mientras Rusia ha sido una fuente importante de combustibles fósiles, China domina el procesamiento de varios minerales críticos al refinar alrededor del 60-70% del litio, níquel y cobalto del mundo.

Por ello, la UE busca reforzar los lazos de cooperación con Latinoamérica para ampliar su oferta de litio, pese a que la extracción a partir de salmueras en países como Chile y Argentina podría quedar atrás ante la aparición de tecnologías capaces de extraer hasta un 95% del litio disponible en la espodumena, indicó Schmidt.

Actualmente, Australia sigue siendo el principal productor de litio a nivel global, basado en métodos de extracción de litio a partir de rocas.

En la cooperación internacional los desafíos seguirán siendo los desequilibrios en las cadenas de suministros globales que ha provocado la guerra en Ucrania, la cual ha golpeado más severamente a Europa, a lo que se suma la inflación y las altas tasas de interés.

“Si sigue disminuyendo [la cadena de suministro], se podría causar la paralización completa de la industria”, dijo Peer Hoth, director de la Unidad de Recursos Minerales del Ministerio de Economía y Protección del Clima de Alemania en el evento. El mundo necesita acero, tierras raras, cobre, litio, selenio y zinc, entre otros minerales, que no existen en Europa, enfatizó Hoth.

Además de la desaceleración económica europea, el panorama podría agudizarse con la entrada en vigencia en 2023 de la ley sobre la cadena de suministro de la UE que traerá más exigencias a las empresas en el manejo de los riesgos ambientales y los derechos humanos, añadió.

Alemania está desarrollando tecnologías limpias para la minería, especialmente para la producción de un acero cero emisiones que podría servir de base para avanzar en el alcance de un cobre verde en los próximos seis a siete años, dijo la vicepresidenta de la asociación de proveedores tecnológicos Minnovex, Marcela Angulo.

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