Mendoza: El plan empresarial por los protocolos de la minería sustentable ya despertó voces en contra

Para el diputado electo Emanuel Fugazzotto es "imposible" que con los entes de control que dispone el Estado puedan existir prácticas 'cuidadas'", como afirman empresarios mineros.

 

Julio Totero, en tanto, defendió la actividad como modelo económico

Por Analía Doña dona.analia@grupoamerica.com.ar

El diputado provincial electo Emanuel Fugazzotto cruzó a los empresarios mineros que impulsan un plan de comunicación para aminorar el desconocimiento que creen que la sociedad mendocina tiene sobre la minería. "Es imposible que con los entes de control que dispone el Estado puedan existir prácticas 'cuidadas'", dice el presidente del Partido Verde.

Sus declaraciones son en respuesta a las de Raúl Rodríguez, presidente de la Cámara Mendocina de Empresarios Mineros (CaMEM), que señaló a Diario UNO que "puede haber minería sustentable".

Para la práctica y el cuidado de la actividad minera, hoy se aplica en Argentina y en el mundo entero el "protocolo de Canadá 'Hacia una minería sustentable' (HMS) que consiste en buenas prácticas, con certificaciones, con auditorías públicas".

Ese protocolo fija estándares internacionales de calidad y control para garantizar una actividad minera responsable, transparente y confiable. Consta de un conjunto de herramientas e indicadores que impulsan el buen desempeño y aseguran que los principales riesgos de la minería se administren de forma adecuada, planteando parámetros e instancias de control externo para las compañías mineras.

De ahí que Rodríguez asegura que hoy por hoy, se trata de una "actividad fácilmente controlable por la comunidad" que "no se conoce porque ni el Estado ni nosotros hemos hecho la tarea".

Fugazzotto ejemplifica, para argumentar su postura en contra de toda actividad minera que vaya en contra de lo habilitado por la ley 7.722 (que prohíbe el uso de sustancias químicas tóxicas en la minería metalífera), que los "entes de control son incapaces de cuidar a los ciudadanos en plena ciudad, de controlar a Aguas Mendocinas, a asociaciones de agua potable, etcétera, en el radio del Gran Mendoza donde se consume agua con arsénico o se derrochan miles de litros".

"Decimos esto porque es imposible pensar, con los antecedentes cercanos de las actividades extractivistas a gran escala en Perú, San Juan, Catamarca y el Amazonas que con los entes de control que dispone el Estado puedan existir prácticas 'cuidadas'", agregó el diputado provincial que asumirá este 1 de mayo.

"Mendoza tiene oportunidades para crecer por fuera del modelo que más desigualdad, aumento de pobreza y deuda ecológica ha generado no sólo para estas generaciones sino para las que vienen", determinó Fugazzotto.

Quien le contestó a su vez fue Julio Totero, empresario metalúrgico del Movimiento de Integración y Desarrollo (MID) aliado de Cambia Mendoza, quien expresó que "el modelo actual nos ha llevado a tener un 50% de personas por debajo de la línea de pobreza" por lo que, para él, "hay que repensar el modelo y la minería es una opción".

Para Fugazzotto, la minería de tercer grado (áridos, carbonatos y yesos) que se desarrolla en Mendoza "genera puestos de trabajo y riquezas" y que el problema que se presenta es que la Provincia "no desarrolla la industrialización de la misma en forma eficiente". De hecho, dice el político, "Buenos Aires genera más riqueza".

Raúl Rodríguez en tanto, siguiendo los números que la Secretaría de Minería de la Nación aporta en un informe anual, expresó que los proyectos de minería no metalífera, que son los que están en desarrollo en Mendoza, no mueven la aguja económicamente ni generan los porcentajes de empleo y salarios que sí generan los proyectos de minería metalífera que se desarrollan en otras provincias, como San Juan, Catamarca, Jujuy y Santa Cruz.

La 7.722, ¿ley antiminera?

Sumando al debate, dice Julio Totero que incluso respetando la ley 7.722 que regula la actividad minera en Mendoza, se han presentado "proyectos de cobre como San Jorge (Las Heras) o Cerro Amarillo (Malargüe) y no avanzan porque la ley no fue concebida para cuidar el agua sino para impedir la minería".

"Esa ley se sancionó hace 15 años y nunca se resolvió el problema del agua", dice y ratifica su postura: "Otro es el camino". Y se apoya además en que "el mundo demanda cobre para la transición energética y en Mendoza prohibimos su explotación".

En respuesta, Fugazzotto retruca que "Hierro Indio y Sales de Potasio tienen evaluación de impacto ambiental con el cinturón de seguridad de la 7.722" por lo que "no es una ley anti minera sino que exige estándares de calidad que garanticen la conservación y el cuidado del recurso hídrico mendocino".

Diario Uno