El radical que ganó en La Pampa es tan antimendocino como Ziliotto

El triunfador y futuro candidato a la gobernación para pelear contra el peronista Ziliotto, que va por la reelección, la tiene contra Mendoza.

El radicalismo celebró como si hubiera ganado el mundial la imposición frente al Pro en las elecciones internas de La Pampa. Allí ganó el radical Martín Berhongaray, que es diputado nacional y fue respaldado por figuras nacionales como Gerardo Morales, Facundo Manes y Martín Lousteau. La presencia de este último dirigente porteño hizo un poco de ruido, ya que la provincia mayormente campesina lo mira de costado por ser el autor de la Resolución 125 cuando era ministro de Economía de Cristina Kirchner.

No fue ningún mendocino a acompañarlo, porque le hubieran restado votos en una La Pampa en donde hasta en las escuelas se "lava el cerebro" en contra de Mendoza.

Los pampeanos han sido convencidos de que todo lo que no tienen o les sale mal, es por culpa de Mendoza y los mendocinos. Así actúan: frente a la falta de norte de esa provincia, levantan alguna nueva "guerra" contra la provincia vecina del oeste y la gente se entretiene mientras la dirigencia política zafa de tener que hacer algo por levantar a La Pampa de su condición eterna.

Berhongaray fue felicitado de lejos, no más, vía Twitter, por Alfredo Cornejo y Julio Cobos.

Pero el triunfador y futuro candidato a la gobernación para pelear contra el peronista Ziliotto, que va por la reelección, la tiene contra Mendoza.

Por ejemplo, pidió explicaciones a Nación, a través de un de pedido de informes, sobre el estado actual del proyecto minero Don Sixto, por el que se pretende extraer oro y plata. El yacimiento está ubicado al oeste de la localidad Agua Escondida, departamento de Malargüe. El legislador sostuvo que ese proyecto minero "genera preocupación y ha recogido distintos cuestionamientos", fundamentalmente a partir del impacto que podría ocasionar sobre los recursos hídricos y el ambiente en general.

Además, está del lado de Alberto Fernández en algunos temas que perjudican a Mendoza. Por ejemplo, sostuvo que "en La Pampa debemos estar sumamente atentos para que el dinero de Portezuelo del Viento no se destine a otra obra que ponga en riesgo un recurso interprovincial que también nos pertenezca, porque estaríamos en la misma".

El legislador nacional y ahora candidato a gobernador pampeano es miembro además de la antimendocina Fundación Chadileuvú. Desde allí consideró disparó diciendo, en su momento, que "evidente que Portezuelo tiene la potencialidad de generar un daño ambiental de consideración aguas abajo". Y recordó que "Portezuelo se pensó en conjunto con un trasvase derivador del río Negro al Colorado para compensar lo que se le sacaba a la cuenca aguas arriba". En ese sentido, dijo que "Río Negro tiene una ley que prohíbe esa obra: es evidente que Portezuelo sola generaría un desastre ambiental".

Sobre declaraciones en defensa de la obra perdida que hizo Rodolfo Suarez, dijo: "Hace rato que todos sabemos que Portezuelo es inviable. Lo que ocurre es que en Mendoza no resulta fácil reconocer esa situación".

"Portezuelo, más allá de las dificultades legales y constitucionales, no se justifica ni financieramente ni en función de la energía que puede generar. Montando un parque eólico, generando menos daño, podés desarrollar la misma energía y gastando mucha menos plata", argumentó Berhongaray.

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