La elección andalgalense, es oportuno decirlo, hay que asociarla a la minería, y, desde esa posición, sacar algunas conclusiones.
Ivana Flores fue la primera en hacer campaña renegando de las explotaciones mineras, lo que refrendó Cativa al cerrar la carrera proselitista con una frase por demás concluyente: "para mí el proyecto Agua Rica es inviable".
Ambos resignaron toda chance de mantenerse en la carrera hacia octubre y quien guardó silencio sobre la minería, Eduardo Córdoba, fue el ganador.
Sí los andalgalenses tomaron nota de estas posiciones y votaron en consecuencia, no caben dudas que hay viento a favor de la minería. Resta saber ahora que dirá Córdoba en la campaña que encarará contra el empresario Miguel Morales que, como el resto del peronismo, apuesta por el desarrollo de la minería, de la cual es proveedor.
¡Otro lindo desafío!. Esperemos entonces el discurso de Córdoba.
El Esquiú
