Cambiemos quiere controlar las comisiones legislativas del Senado
- 22 de enero, 2018
Diario La Provincia de San Juan

El oficialismo y la oposición peronista deberán sentarse a discutir la distribución de los espacios en las 25 comisiones que integran el Senado de la Nación, en las cuales Cambiemos pretende aumentar el número de sus integrantes y llevarse la Presidencia de algunas de las más trascendentes. Pese a que el jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, anunció en la semana que el Poder Ejecutivo no convocará a sesiones extraordinarias en febrero, los principales referentes de las dos primeras minorías de la Cámara alta tendrán que sentarse para definir cómo se conformarán esos comités legislativos que tienen la importante tarea de dictaminar los proyectos de ley que luego serán llevados al recinto de sesiones. La discusión promete generar algunas rispideces entre el oficialista Interbloque Cambiemos, conformado por 24 senadores, y el Interbloque Argentina Federal, de 25 legisladores de extracción peronista no kirchnerista. Casi al margen de la discusión, como ocurre en cada recambio parlamentario, quedarán las bancadas más chicas como el Frente para la Victoria, entre cuyos ocho integrantes figura la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y el Interbloque Federal, integrado por siete peronistas y representantes de partidos provinciales. Menos consideradas serán las opiniones de bloques como el Frente Renovador de la Concordia de Misiones, con dos integrantes, y el Frente Cívico por Santiago, con tres. La confrontación se revelará cuando deba integrarse la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, encargada de estudiar la validez de los Decretos de Necesidad y Urgencia, y cuya tarea parlamentaria no se frena durante el receso. El DNU sobre desburocratización del Estado firmado por el presidente Mauricio Macri la semana pasada será el primer tema a debatir en el año. El interbloque oficialista en la Cámara baja ya logró, mediante cálculos en los que se utilizó hasta el sistema D?Hont, colocar a cinco de los ocho diputados que la conforman. En el Senado, en tanto, aseguraron que la intención es ocupar, como mínimo, tres lugares entre los cuales está la presidencia de la Bicameral para que permanezca en manos del formoseño Luis Naidenoff. De ese modo, al peronismo no kirchnerista le quedarían otros tres o cuatro espacios y los otros dos se distribuirían entre el Frente para la Victoria y el interbloque federal. "Es una comisión clave. Tiene que quedar en manos del oficialismo", enfatizaron desde las oficinas del radical Naidenoff. Además que quedarse con la presidencia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, en manos del bonaerense Esteban Bullrich, Cambiemos también pretende dirigir desde marzo las reuniones de la estratégica Comisión de Asuntos Constitucionales, encargada de viabilizar el pedido de desafuero que pesa contra Fernández de Kirchner por su presunta participación en la firma del acuerdo con Irán para, supuestamente, dar de baja las alertas de Interpol contra sospechosos del ataque a la AMIA. Asuntos Constitucionales también será el foco de atención si el gobierno vuelve a avanzar con la discusión de la Reforma Electoral. Hasta el 9 de diciembre pasado esa comisión estaba encabezada por el ultrakirchnerista Marcelo Fuentes, hoy compartiendo bloque con la ex presidenta. Cambiemos también quiere manejar las comisiones de Infaestructura, Vivienda y Transporte, Economía Nacional e Inversión y Seguridad Interior y Narcotráfico y seguir al frente de Salud y Deporte y Relaciones Exteriores. La Comisión de Acuerdos, encargada de estudiar los pliegos de funcionarios judiciales, cargos en el cuerpo diplomático y ascensos militares, seguirá siendo presidida por el justicialismo y es probable que el salteño Rodolfo Urtubey continúe siendo su presidente. Lo mismo ocurrirá con Trabajo y Previsión Social que, habitualmente, queda para que la maneje el principal partido de la oposición. Otras comisiones clave como Justicia y Asuntos Penales, Legislación General, Minería Energía y Combustibles, Educación y Cultura y Coparticipación Federal de Impuestos, serán también parte de la discusión y podrían funcionar como moneda de cambio en las deliberaciones que comenzarán en febrero.La discusión promete generar rispideces entre el oficialista y el Interbloque Argentina Federal, de extracción peronista no kirchnerista.
Diario La Provincia de San Juan